
Cual mutante, un australiano de 61 años ha decidido, en un alarde de ingenio, ponerse otra oreja más extra no contento con las dos que vienen de fábrica. La tercera oreja tendrá que coexistir en el antebrazo de este señor.Pero no te asustes, la oreja no tendrá las funciones básicas de una oreja. Ha sido creada en un laboratorio con cartílago humano. Lo más freak de todo, es que quiere ponerle un micrófono...